Las conversaciones calientes con su padrastro acabaron así
No es raro que un jovencito tenga conversaciones con su nuevo padrastro. Nunca conoció a su padre, por lo que aquél hombre era toda una figura paterna para él a pesar de que no era excesivamente maduro. Pero con lo que el muchacho tal vez no contaba es que esas conversaciones, en principio inocentes, acabarían en algo bastante inapropiado. Y es que el jovencito se ponía caliente cada vez que escuchaba su voz.
Finalmente y tras un rato de charla por el teléfono el padrastro acudió a su habitación, por lo visto no estaba tan lejos. Los dos de hecho estaban solos en casa, ya que su madre había salido a trabajar. Tras verlo allí tumbado en su cama medio desnudo el hombre no pudo evitar acercarse al joven, ese día estaba dispuesto a todo.
Nada más verlo se sorprendió, pero le gustó tener a su padrastro a su lado. Ambos se acercaron el uno al otro y comenzaron a tocarse, lamerse, besarse y por supuesto a mamarse las pollas e incluso sus culitos. Finalmente el padrastro penetró con mucha dureza el ano del muchacho, el cual no podía evitar sentirse tan especial por tenerlo solo para él. Le acababa de quitar a su madre su hombre.
