¿Te gusta que te haga esto hijo?
Este viejo degenerado andaba ya tiempo detrás de su hijastro. Le ponían cachondo los jovencitos a pesar del hecho de estar casado. Pero el que le calentaba especialmente era su hijastro. Se habían quedado solos en casa y fue el momento que aprovechó aquél pervertido para ir a buscar al chico con intención de tener sexo con él. Al parecer el joven lo estaba esperando, solía tener sueños húmedos con su nuevo padrastro. Así que nada más verle aparecer ambos se besaron apasionadamente. Que estuviera casado con su madre no parecía importarle demasiado, al contrario, eso le gustaba aun más.
Tras desnudarse mutuamente el maduro le comió su polla y después se puso a lamerle los pies mientras le preguntaba si eso le gustaba. El jovencito estaba sorprendido, no se imaginaba que su padrastro fuera tan vicioso, pero eso era un punto a su favor desde luego. Luego fue el joven el que le mamó la polla al viejo.
Los dos sabían que tener sexo anal estaba mal, al fin y al cabo eran familia política y el hombre debía ejercer de padre. Pero un poco de sexo oral, mamadas, besos y tocamientos no harían daño a nadie… así que ni se lo pensaron y pasaron una de las mejores tardes de sus vidas aun sin llegar a la penetración.