A pelo con su hijastro en la cocina
Cuando su padrastro llegó a casa el chico, un tío bien musculoso, le estaba esperando en la cocina. Nada más llegar le pidió explicaciones por lo que había hecho ese día. El hombre disimuló aunque lo sabía, pero lo que ignoraba es que su hijastro le había pillado. Tenía fotos de su padrastro besándose con un chico joven.
Le había descubierto y necesitaba su silencio, así que hizo lo mismo que habríamos hecho cualquiera, sacar la verga y enseñársela para ver si se animaba. El muchacho se agachó y le hizo una mamada, claro que quería sexo con él.
Después de la mamada se desnudaron y su padrastro lo penetró a pelo en la misma cocina, por fin había conseguido ese muchacho lo que quería.