Los jovencitos sabían como disfrutar
Los dos estaban solos en casa, por lo que ya sabes como suele empezar y acabar la cosa. Estaban besándose apasionadamente sobre la cama sin camisetas, les sobraba la ropa. Se la fueron quitando y uno de ellos empezó a comerle el rabo al otro, hasta que se la metió dentro de su culo. Solo con ver al chico moviéndose dentro del otro a uno se le pone dura, el cabrón estaba realmente caliente mientras se lo follaba y parecía estar taladrándolo. Cambiaron varias veces de posición, hasta que al final con el muchacho abierto de piernas y el otro dentro de él los dos acabaron corriéndose. Acabaron totalmente exhaustos tumbados en la cama.